Curioso...
Es curioso cómo funciona la memoria; cómo guarda ciertos fragmentos y desecha otros... cómo emergen sentidos y escalofríos que se creían perdidos, tan antigüos y tan olvidados que parecen ser nuevos...ecos como hielos que, de tan fríos, queman otra vez.
Curioso es también dejar huellas en otros, sobre todo cuando son afortunadas. Y más curioso aún es verlas irradiadas en una cara linda cuando la encuentras en un pasillo.
Creo que además es curioso ver como salen a la superficie los rastros dejados en algunos que nunca los notaron, y que con el tiempo comienzan a rondarte y a buscarte, guiados por algo que no entienden pero que sienten poderosamente.
Por eso también es curioso que otros tantos se alejen y se pierdan y desaparezcan en una dimensión que alguna vez fue construída y compartida en complicidad; todas las esperanzas y las ganas se reparten como hojas en un remolino, hacia todos lados, autistas, solas, sin la posibilidad de volver a encontrarse.
Por eso, el tiempo es otra cosa curiosa; borra, genera y cambia tantas cosas, tantas personas, muchas ideas. El tiempo pasa y se detiene según los estados de ánimo, según las pasiones, según los caminos...y le presta el lápiz a la memoria para que anote lo que estime conveniente.
Quizás lo más curioso sea que la clave de todo está en la cantidad de curiosidad; porque sin las preguntas no puede haber respuestas y sin la curiosidad, no se harían preguntas; todo dejaría de ser curioso y se volvería igual a cualquier cosa...ya no habría ni más pruebas ni más errores y cada respiro sería más insípido que el anterior.
Porque la curiosidad mató al gato, pero antes, ese gato pudo entender todo lo que tanto se había preguntado...
1 comentario:
entonces,quiero morir como un verdadero gato!
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